Cuando googleamos ¨Praga¨ lo primero que aparece en el buscador son frases como ¨la ciudad de las cien torres”, “monumento de la UNESCO” y “una de las ciudades más lindas del mundo¨ y sin dudas así es, pero la experiencia nos dice que también puede ser una ciudad caótica por la cantidad de turistas que recibe al año, ubicandose en el puesto número 20 de las ciudaddes más visitadas del mudo según el sitio web statista.com. Pero eso no tiene que asustarnos. El encanto de Praga le gana a las multitudes.
Convertida en una de la capitales
imperiales de Europa del Este, su historia comienza con el pueblo Celta de los
Boios allá por el año 500 a.C.
Con el paso del tiempo llegarían los germánicos, los eslavos y los avaros, pero
su nacimiento se produjo alrededor del siglo IX, cuando el príncipe premyslita Borijov unificó las tribus dispersas en Bohemia, eligió Praga como residencia real y construyó el Castillo sobre la colina. Alrededor del que los mercaderes
y artesanos instalaron sus tiendas y viviendas, dando origen a la ciudad.
En el 950 Praga comenzó a formar parte del Sacroimperio y desde el siglo XIV hasta 1618 (300 años después) se convirtió en su capital. Período durante el que vivió su época de mayor propsperidad.

En el 1061 el próspero asentamiento de Praga hizo que se convirtiera en residencia de los duques de Bohemia, y Wenceslao I le concedió el derecho de ciudad, naciendo así la Ciudad Vieja (Staré Mesto).
Bohemia se convirtió en reino en 1212, con Otakar I Premyslida, pero fue su sucesor quien dió estatus de ciudad al poblado llamado Ciudad Pequeña (Malá Strana), donde se asentaron inmigrantes del norte de Alemania y en 1338 Carlos IV de Alemania concedió a los nacionalistas checos la Tercera ciudad: la Ciudad Nueva (Nove Mesto) uniéndola a las otras con su famoso puente.
Construyó además la entrada a la
ciudad vieja, torre de la pólvora, llamada así a partir de la llegada de la pólvora en el S.
XV.
En ese tiempo se construye también la grand place, donde funcionaba el mercado y donde se
encuentran la iglesia Notre Dame de Tyn (nuestra señora acorralada) y la estatua de Jan Hus, impulsor de la reforma eclesiástica checa y uno
de los precursores de la Reforma Protestante, quien fue condenado a morir en la
hoguera por hereje.
Fernando I fue elegido Rey de Bohemia en 1526. Desde entonces y hasta 1918 la historia de Praga estaría ligada a Austria y a la casa de los Habsburgo.
La Cuarta ciudad, Hradcany (barrio del castillo) se creó en 1598, y para el 1600 se construye el Clementinum, hoy sede de la Biblioteca Nacional.
Las cuatro ciudades quedaron unificadas en 1784 por José II (hermano de Maria Antonieta) quién, después de 500 años de confinamiento, derribó las murallas del barrio judío de Josefov.
Durante 5 siglos los judíos estuvieron confinados a vivir dentro de las murallas que rodeaban este barrio. Era un barrio amurallado dentro de una ciudad amurallada.
Por supuesto la zona contaba con su propia sinagoga pero para su construcción se contrataron arquitectos y mano de obra cristiana, ya que los judíos se dedicaban al comercio y no a la arquitectura, lo que hizo que el templo tenga la apariencia de una iglesia católica.
Un poco más aca en la historia
En 1848 se produce la revolución contra Austria, llamada «primavera de los pueblos». Los checos, como otros pueblos del imperio austriaco, se sublevaron y consiguieron su autonomía, pero fue aplastada poco después por las tropas imperiales que bombardearon Praga.
Siglo XX
En 1918, al caer el Imperio Austrohúngaro, Checoslovaquia obtuvo su independencia y Praga se convirtió en capital del país.
En 1939 las tropas alemanas ocuparon el país hasta el fin de la guerra, en 1945. El ejército ruso, que aparentemente liberaba Praga de los alemanes, estableció un régimen comunista en el país.
En 1968 se produjo la llamada «Primavera de Praga», un intento de flexibilizar la política, pero el país fue invadido por Rusia y los otros países integrantes del pacto de Varsovia.
En 1989 el Partido Comunista perdió su monopolio político como consecuencia de la Revolución del Terciopelo. Comenzó el período de transición hacia las primeras elecciones libres, que se celebraron en 1990.
En 1993 Checoslovaquia se dividió en dos, República Checa, con Praga como capital, y Eslovaquia, con capital en Bratislava.
Siglo XXI
El resurgimiento de Checoslovaquia se conoce en el mundo de la política y la economía como el «milagro centroeuropeo». Un país que pasó dos guerras, perdió miles de habitantes en campos de concentración, sufrió una ocupación durante casi 50 años y resurgió como un país moderno, con una economía pujante, enfocada en el turismo.
Praga se convirtió, además, en una meca mundial del diseño, tanto en ropa como en objetos decorativos y arquitectura. Un claro exponente de ese cambio es La casa danzante de Frank Ghery (1993). De estilo deconstructivista se saca de encima la geometría simulando una pareja de bailarines de cristal y cemento. Conocida como Fred y Ginger, esta casa se encuentra a orillas del río Moldava contrastando con los edificios de estilo neoclásico, dando una muestra más de lo que Praga tiene para ofrecer.